El cambio de ritmo de la moda después del coronavirus.
Probablemente el mundo ha cambiado, la época del sobreconsumo pondría fin a la era del fast Fashion.
La actual crisis económica producida por el coronavirus, ha hecho que varios sectores del mundo empresarial y entre ellos de el mundo de la moda se reinvente.
Ya en Febrero en Milán Giorgio Armani celebró su pasarela a puerta cerrada y a su vez anunció que sus colecciones de primavera-verano permanecerían en sus tiendas hasta finales de septiembre, algo muy poco habitual en este sector pero que poco a poco en este año ha cobrado sentido.
Donatella Versace también optaría por el mismo por lo mismo y lo llevaría a futuro.
Vender ropa de invierno en invierno y verano en verano, son ideas que para Giorgio Armani como para la mayoría de diseñadores las ideas han sido muy similares.
Sin duda Stella McCartney defensora de la moda slow fashion, resume todo en que seria de la moda después que acabe el coronavirus.
“Lo que las empresas tiene que hacer por el cliente es hacer por el cliente abastecer mejor y ser mejores marcas”
Pero qué significa al decir mejor marca; en primer lugar ser sostenible y en segundo acercarse al cliente.
Las conclusiones son claras. La sostenibilidad será mejor valorada por los clientes que optarán por un consumo responsable y digitalizado, lo que sería el fin del hiperconsumo que hoy en día conocemos.
Crear marca, escuchar a los consumidores y ofrecer nuevos servicios será la base para entender cuáles son las necesidades del cliente, con una buena comunicación de la marca tanto en escaparates como paralelamente vía online.
Las ventas online han llegado para quedarse, después del coronavirus cambiarán muchas cosas, entre ellas hábitos de consumo, de producción y sobre todo la nueva forma de entender la moda.
Fuente imagen: Giorgio Armani.
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